Sex and the city

Hoy quedé sobre las 12:30 de la mañana con una amiga de Barcelona a la que hacía pràcticamente cuatro años que no veía. El reencuentro me ha encantado. Recordar viejos tiempos, pues estudiábamos juntos. Ponernos al día con los cotilleos y darnos cuenta de como nos había cambiado la vida a todos en tan solo cuatro años.
Estamos todos desperdigados por ahí, y con muchos de ellos yo he perdido el contacto. Y enterarte de que una amiga que vive en londres está embarazada de seis meses teniendo la misma edad que yo, es decir 20 años, es un claro ejemplo de cómo han llegado a cambiar nuestras vidas.
Y hoy me ha apetecido que pudieramos coincidir todos en Barcelona y hacer una cena para reencontrarnos todos y darnos cuenta de como estámos de cambiados pero también darnos cuenta de que algo nos une, aquellos años en los que íbamos todos juntos a clase.
Y como decía la madre de Forest Gum "La vida es una caja de bombones y nunca sabes cual te va a tocar", y a veces debajo de su emvoltura, mientras nadie los prueba, el sabor va cambiando con los años.
Hoy también me ha entristecido comprender el porqué de algunos distánciamientos y me ha dado pena que aquellos que estabamos tan unidos ayer, hoy no sepamos los unos de los otros.
Pero me quedo con lo bueno del reencuentro y es saber, que aunque tenga la falsa impresión de que no, sigo teniendo buenos amigos en Barcelona, aquellos que son los de toda la vida...